3 errores que no podés cometer en tus servicios de asesoramiento de imagen

La sesión de asesoramiento de imagen puede fallar. ¿A qué me refiero? A que tu clienta o cliente no quede lo maravillado que esperabas, que tu propia percepción te marque que tal vez algo más podrías haberle aportado o que la info que le hiciste llegar no fue del todo acertada.
¡Calma! La autoexigencia nos juega todo el tiempo pésimas pasadas. Porque al poner nuestra vara personal por las nubes, un momento un poco más flojo lo vivimos como una catástrofe. O el resultado de un servicio con un interlocutor impredecible -que los hay- lo tomamos un test definitivo de nuestros talentos.

Sostengo que esta distinción nunca está demás y es una instancia oportuna para comenzar a adoptar una mirada amorosa sobre nosotras mismas. Algo millones de veces más fructífero que la autocrítica despiadada y que luego podremos transmitir a quienes confíen en nosotras como profesionales.
Al mismo tiempo, con una perspectiva realista de nuestras debilidades -todos estamos en continuo aprendizaje-, quiero invitarlas a pensar juntos errores posibles de evitar y que quitan lucimiento en nuestra tarea.

no cometas estos errores.jpg

Nuestra lupa interna

Esta es la lista de equivocaciones frecuentes que suelen surgir en mis clases y mentorías.

1. Dar recomendaciones demasiado vagas

Está claro que nadie querrá pagar un servicio de asesoramiento de imagen para llevarse tips sueltos que pueda encontrar en Instagram.

Las clientas y clientes buscan datos reveladores, información perdurable, soluciones prácticas para su día a día y hasta impulso para ganar confianza con su mensaje exterior.

Para alcanzar estos estándares, un punto es la actualización constante. También, contar con las herramientas que permitan evaluaciones ajustadas.

Mi propósito desde hace unos años es brindarles métodos que estén a esa altura. El sistema de colorimetría FD de 16 estaciones ® cumple con esta misión. Por otro lado, ¡estén atentas las próximas clases gratuitas sobre el uso del color! Me tiene muy entusiasmada y sé que las sorprenderá. (asegurate de estar suscripta a mi lista VIP, si aún no estás, podés hacerlo aquí.)

2. Brindar una avalancha de datos técnicos

La contracara del punto anterior es la tentación de transmitir en un único encuentro absolutamente todo nuestro conocimiento. Sin ninguna adaptación para todo público.
Pero más no es más. Y tal vez del otro lado no resulte atractivo escuchar conceptos teóricos que no sepan cómo llevarlos a la práctica.

La escucha activa y una reflexión sincera sobre el menú de propuestas -uno de los temas de las mentorías individuales- te permitirán dar el enfoque más acertado.

3. No preparar los encuentros

Nuestro trabajo profesional va mucho más allá del tiempo compartido con la o él cliente. Al no tener en cuenta la instancia preliminar, la sensación será de un trabajo al paso. ¿Y quién no quiere ser esperado y recibido con suma atención?
Mis consejos: darle preponderancia a la entrevista inicial. Te dará el rumbo preciso del asesoramiento.
Además, recorrer atentamente su Instagram, para conocer su estilo de vida, e investigar sobre los códigos de vestimenta de sus ámbitos habituales.

Por último, nunca pierdas de vista que los cambios precisos generan un fuerte impacto.
Si sentís que querés ir un poco más allá, la automentoría de mi Método BRILLO de desarrollo personal será un excelente inicio.
Consiste en un entrenamiento totalmente online y a tu ritmo que te llevará a priorizar tus talentos, detectar tus oportunidades y generar más atracción hacia tu negocio.
El valor del curso es de ARS 6500 o USD 55. ¡Lee mucho más aquí!

Contame si te sirvió la info y si habías pensado en estos puntos para maximizar tus sesiones de asesoramiento de imagen. Me encantará conocer tu experiencia.

Anterior
Anterior

Impulsá tu marca registrada como asesora de imagen

Siguiente
Siguiente

¿Querés aumentar tus ventas como asesora de imagen?